El estilo grunge es una manera de expresar la inspiración callejera, inclinándose por el desenfado y la rebeldía.
Un estilo que data de los años 80 y 90, consistiendo en la busqueda del “no artificial”, con elementos asequibles para la decoración, de calidad, sin ser costosas. El aspecto que lucen es desaliñados e informales, puesto que no se le daba importancia a lo material.
Hoy en día los profesionales como arquitectos interioristas y diseñadores, encuentran un sentido a este estilo; en vez de parecer abandonado, le sacan el mayor provecho para tener una vista desenfrenada; de esta forma, se consiguió un tipo de decoración que invita a experimentar con lo que ya se tiene en conjunción con otros elementos que se consiguen en temporada.
La personalidad del Grunge no solo es utilizada para diseños habitacionales; tambien, se empleó en bares, boutiques, peluquerías, galerías, etc. Les mencionaré algunos materiales natos, que son: los grafitis, las telas con estampados a cuadros, la madera, el metal, el ladrillo y la madera.
Ahora veremos algunas características para crear un ambiente con este estilo:
Destaca el uso de sofás, sillones y pufs, donde se emplean cojines o mantas en un diseño unicolor en tonos tierra o estampado a cuadros.